En 2017, Brandon y Kelly dieron la bienvenida a Bentley Madsen a sus vidas, convirtiéndolo en la última incorporación a su familia. Puede que Bentley no fuera un niño humano, pero rápidamente se convirtió en un miembro querido de su familia.

Sin embargo, cuando Tyler, su primer hijo real, nació en febrero del año siguiente, él ocupó un lugar central. Curiosamente, Bentley, su compañero peludo, insistió en ser parte de la emoción cuando Brandon y Kelly decidieron tener una sesión de fotos con su recién nacido.

Kelly describe a Bentley como un goldendoodle de 5 años con una personalidad “tonta, divertida, inteligente, devota y afectuosa”. Una cosa que distingue a Bentley es su total incapacidad para atrapar una pelota.

Al principio, Brandon y Kelly dudaban un poco en presentarle a su juguetón bebé peludo a su nuevo bebé humano. Para ayudar a Bentley a acostumbrarse al olor de Tyler, enviaron a casa una manta y un gorro del hospital que olía a su hijo. Dos días después, le permitieron a Bentley conocer a Tyler y fue entonces cuando comenzó su amistad.

Bentley mostró curiosidad por Tyler, y a menudo se acercaba a él para olfatearlo y consolarlo cuando lloraba. La pareja se refirió en broma a Bentley como su “vigilante de bebés” porque a menudo detectaba la angustia de Tyler antes que ellos.

A medida que Tyler creció, también creció su vínculo con Bentley. Los dos se volvieron inseparables, especialmente cuando Tyler compartía trozos de comida con su amigo peludo. Bentley estaría ahí cuando Tyler dormía la siesta o jugaba con sus padres.

Finalmente, se realizó una sesión de fotos para capturar los preciosos momentos de los primeros días de Tyler. Kelly explicó que aunque optaron por no contratar a un fotógrafo y decidieron tomar las fotos ellos mismos, Bentley no se iba a perder la acción.

“Teníamos todo configurado y tan pronto como Tyler estuvo en su lugar, ¡apareció Bentley!” Kelly recordó. Bentley estaba acostumbrado a ser el centro de atención y a que le tomaran fotografías, por lo que tenía que estar al lado de Tyler.

No importaba dónde colocaran a Tyler, Bentley insistía en estar cerca, ya sea acostado a su lado o apoyando su cabeza sobre él. Kelly enfatizó que Bentley y su hijo compartían un vínculo innegable.

Pasó un año después de esa sesión de fotos inicial, y cuando Tyler celebró su primer cumpleaños en febrero del año pasado, sus padres tenían fotografías de un año para conmemorar su crecimiento. ¿Pero quién más estaba allí, parado orgullosamente junto a Tyler? ¡Nada menos que Bentley!

Kelly habló sobre la evolución de la relación entre su hijo y su leal perro y dijo: “¡Las aventuras de Bentley y Tyler apenas han comenzado!” Incluso predijo que Tyler podría pronunciar “Bentley” como su primera palabra, destacando la fuerte conexión entre los dos.

En la casa Madsen, Bentley no es sólo una mascota; es un querido miembro de la familia que comparte las alegrías y los hitos de su creciente familia.