Fuentes del PSG confirman la sanción y se reafirman en que el argentino no asistió a un entrenamiento
El viaje de Leo Messi a Arabia Saudí ha dinamitado al PSG en la recta final de la temporada. El futbolista decidió viajar al país árabe a cumplir con un contrato con la agencia de turismo saudí después de haberlo aplazado hasta en dos ocasiones, según pudo saber MARCA.
Según fuentes del club parisino, el jugador argentino de 35 años “unilateralmente” decidió no asistir al entrenamiento planificado para el lunes tras la derrota 1-3 frente al Lorient del domingo y atender “compromisos promocionales” a miles de kilómetros de París.
Mbappé y Messi, durante un partido con el PSGAurelien MorissardAP
El PSG, que se encuentra en la posición de ganar su 11ª Liga francesa, lo que le colocaría como el club más laureado de Francia zanja la cuestión afirmando que “ningún jugador está por encima de este club”. Eso también se ha ido notando a lo largo de las dos temporadas de Leo en París, cuya relación con los hinchas lleva ya tiempo deteriorada por su falta de rendimiento y que no ha llegado a haber una comunión total en ningún momento entre argentino y aficionados al PSG.
Además, el equipo parisino pide “respeto” por la institución y demuestra mediante esta sanción “de interés internacional” que la directiva, empezando por Al Khelaïfi, y cuerpo técnico están implicados en mantener la disciplina en el seno interno del conjunto del Parque de los Príncipes.
Un divorcio sin vuelta atrás
El viaje a Arabia de Leo Messi y su consiguiente sanción supone un divorcio ya definitivo con el club del que no hay vuelta, según apunta L’Équipe, que publica que es seguro que el argentino, después de este episodio, no continuará en el club parisino.
Club y jugador llegaron a un principio de acuerdo para continuar juntos durante el Mundial, pero ese acuerdo no se materializó en las reuniones posteriores. Además, en el club empezaron a surgir algunas dudas deportivas sobre la idoneidad de renovar al ’10’. No por su calidad, que consideran fuera de duda, sino por su encaje con Neymar y Mbappé y la imposibilidad de que en los grandes partidos el PSG tenga un equilibrio con los tres sobre el terreno de juego.
Además, Messi no ha terminado de conectar con los aficionados, que le han silbado en más de una ocasión. Todo ello llevaba al PSG a dudar. Tampoco el futbolista las tenía todas consigo a la hora de renovar. Tras la sanción, pocas dudas quedan ya: Leo Messi cambiará de equipo el próximo verano, cuando cumple su contrato con el cuadro presidido por Nasser Al-Khelaifi.