El proyecto Greenhouse Buses de Emilio Alarcón pretende transformar la movilidad interurbana convirtiendo los autobuses eléctricos en invernaderos móviles que aborden los retos del calentamiento global y la falta de espacios verdes en las ciudades. La serie <strong>arte digital</strong> propone la utilización del espacio disponible en el interior de los autobuses para el cultivo de plantas, arbustos y pequeños árboles, y su conversión en oasis itinerantes en medio de entornos urbanos. El proyecto se logra mediante un cuidadoso proceso iterativo que utiliza la popular plataforma de inteligencia artificial Midjourne
Las estructuras cerradas de los autobuses permiten un ambiente controlado similar al de un invernadero, ya que la luz del sol puede penetrar a través de burbujas transparentes o translúcidas hechas de materiales como vidrio, etileno teflón o policarbonato, proporcionando a las plantas la cantidad necesaria de luz para la fotosíntesis. Las consideraciones técnicas desempeñan un papel importante a la hora de garantizar el funcionamiento exitoso de los autobuses de invernadero. Los sistemas de ventilación adecuados son esenciales para regular la temperatura y la humedad, evitando la acumulación de calor y humedad que podría afectar negativamente el crecimiento de las plantas. También son necesarios sistemas de anclaje para fijar las plantas a la carrocería o estructura del autobús, garantizando la seguridad y minimizando los problemas de vibraciones.
todas las imágenes cortesía de Emilio Alarcón
PROYECTO DE AUTOBUSES DE INVERNADERO OBJETIVO MEJORAR LA CALIDAD DEL AIRE
Se pueden emplear varios métodos de cultivo, como la hidroponía, donde las plantas crecen en soluciones nutritivas en lugar de sustratos tradicionales. También se pueden utilizar sustratos livianos para minimizar el peso adicional causado por las plantas y los contenedores. Más allá de su atractivo estético y la creación de espacios verdes en las ciudades, los autobuses con efecto invernadero tienen el potencial de reducir el impacto ambiental, comparte <strong>el creativo multidisciplinario</strong>. El aumento de la vegetación ayuda a absorber dióxido de carbono y mejora la calidad del aire.
Estos espacios verdes móviles también pueden funcionar como miniparques, ofreciendo un entorno más agradable y natural para pasajeros y peatones. Durante los días calurosos, las ventanas y las aberturas superiores de los autobuses del invernadero se pueden abrir para permitir la circulación del aire, manteniendo una temperatura adecuada y evitando el sobrecalentamiento de las plantas. También es importante crear zonas climatizadas para el confort de los pasajeros. Para ello se pueden adaptar autobuses de distintos tamaños, desde autobuses de dos pisos hasta minibuses. Se requerirá mantenimiento por parte de jardineros profesionales, principalmente para riego y control de enfermedades y plagas.
El proyecto pretende transformar la movilidad interurbana convirtiendo los autobuses eléctricos en invernaderos móviles.
la serie de arte digital aborda la falta de espacios verdes en las ciudades
El cultivo de plantas, arbustos y árboles pequeños dentro de los autobuses transforma los entornos urbanos.